Unidad pastoral Santa María de Olárizu / Olarizuko Andre Maria Pastoral Barrutia

Viernes 26 de Abril del 2024

Caminar, edificar, confesar

Grup de Vida Ascendente


VIDA ASCENDENTE GUIONES PARA ENCUENTROS DE GRUPO 2014/15   Nos encontramos con tres palabras claves, que, durante el presente Curso 2014/15, hemos de repetir, no sólo hasta la saciedad, sino, sobre todo, hasta hacerlas vida en nuestra vida. Estas tres palabras dan título a nuestros Guiones: “CAMINAR. EDIFICAR. CONFESAR”: ¡Son las tres palabras, que el papa Francisco propuso como pautas de vida cristiana en su primera homilía!

Nuestra Comisión Permanente se ha hecho eco de estas palabras del papa Francisco, proponiéndonos a los mayores, miembros de Vida Ascendente, unas reflexiones, que nos ayuden a CAMINAR en fraternidad, acompañados del Señor, a EDIFICAR una Iglesia viva, un movimiento activo, en marcha y a CONFESAR a Cristo como Señor de la historia.

CAMINAR Nuestra vida es un camino. Cuando nos detenemos, la vida no funciona. Y un cristiano, que se identifica como seguidor de Jesús, debe caminar siempre, y caminar en su presencia o a su luz.

Caminar es avanzar, tomar decisiones, descubrir nuevas posibilidades, nuevos horizontes…

 

EDIFICAR El seguidor de Jesús ha de edificar la Iglesia con piedras vivas sobre aquella piedra angular, que es el mismo Jesús. Un cristiano se caracteriza, pues, por un planteamiento serio de participación activa y comprometida en distintas tareas pastorales, es decir, en la edificación de una comunidad viva.

Edificar significa ser activo, creativo, sin contentarse con obedecer a lo mandado y quedarse ahí, dormido, en una pasividad estéril…, siendo simplemente “buen cristiano”.

 

CONFESAR Dice el papa Francisco: “Podemos caminar todo lo que queremos, podemos edificar tantas cosas…, pero, si no confesamos a Cristo, la cosa no funciona. Nos convertiríamos en una ONG compasiva, pero no en la Iglesia, la esposa del Señor”.

Confesar a Jesús es contemplarlo,  para, al mismo tiempo, dar testimonio de El, de sus acciones y palabras, es decir, de su Evangelio. En definitiva, confesar a Jesús es seguirle, identificarse con El, dejarse llevar por El, mirar la vida como Él la mira…

 

¡Que Jesús, “camino, verdad y vida” siga, acompañándonos en nuestro peregrinar de cada jornada!